DECIDÍ SER FELIZ…

DECIDÍ SER FELIZ – ¿Se puede? • 

Soy feliz porque decidí serlo conmigo mismo, al dejar de darle el poder a los humanos sobre eso. 

Soy feliz porque descanso en el poder de Dios, no en las reglas de ninguna religión ni de imperfectos. 

Soy feliz teniendo noción de que la tristeza es parte de la vida, y de que en ocasiones es necesaria para limpiar los ojos y ver mejor. 

¿Cómo se logra ser feliz? No hay una formula mágica, ni hay una lista absoluta de pasos para lograrlo. Quien diga eso miente. 

Pero si de algo te sirve, parte de mi proceso de aprendizaje para ser feliz es ver y apreciar que el NO y el PERO tienen su lado positivo: 

– No necesito la aprobación de nadie, pero respeto a cada cual. 

– No soy responsable de los asuntos e issues de nadie, pero puedo ayudar si está a mi alcance. 

– No vivo con expectativas ni espero nada de nadie, pero no dejo de servir y dar de lo que Dios me da, cuando pueda.

– No tengo que salvar a nadie, pues no soy Cristo, pero puedo ayudar a que vidas sean salvas por Él. 

– No vivo en el pasado, pero no olvido lo aprendido. 

– No tengo el control de todo ni del mañana, pero mis tiempos están en Dios. 

– No dependo de nadie para que me motive a realizar mis sueños, pero valoro los buenos consejos.

–  No tengo todas las contestaciones de la vida, pero le sirvo al Omnisciente. 

– No lo sé todo, pero tengo en claro mi propósito y visión de vida. 

– No le doy poder ni atención a lo que no edifica, pero hago mi parte para edificar. 

– No soy multi millonario, pero tengo herencia en el cielo, con la cual dejo legado en la tierra. 

– No me creo perfecto, pero tengo claro mi valor, porque proviene del Todopoderoso y Perfecto Dios. 

– No tengo que tener la admiración del mundo, pero sí estar para los que me aman de verdad. 

Ser feliz es un proceso individual y único que cada cual debe emprender con la ayuda de Dios, quitando todo concepto religioso-condenatorio, que en nada tiene que ver con la esencia de quién realmente es Él. DIOS ES AMOR • … Sí. PUNTO.

Hace tiempo que decidí, no sólo hablar de ella, sino abrazarla: LA GRACIA. 

Hace tiempo que dejé de escuchar voces extrañas, para escuchar La Voz de la Verdad, lo que se logra con el oído de la FE. 

Hace tiempo que hice las pases con la vida, para dejar de sobrevivir ¡y comenzar a vivir! 

Sí. Soy feliz. Con todas la implicaciones de ser un simple humano. 

Un abrazo de fe… y mejor con café.

– Dr. Danny@lbelo 

[Te comparto verdades de mi corazón, que nacen de mis encuentros de madrugada con Dios, en la Cabaña de Gracia. Espero en algo, bendiga tu vida.] 

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